CICUTA

Cicuta

Jaime Flores Martínez

¿Ignorante?

Sobresaltado por el incesante repiqueteo, el periodista mexicalense levantó su teléfono la madrugada del 4 de junio para escuchar que –minutos antes—el empresario Jorge Hank Rhon había sido detenido en su residencia por el presunto delito de acopio de armas. Ni el gobierno lo sabía.

Por algunos momentos permaneció desconcertado, aunque reacciono de inmediato al saber que su interlocutor era nada menos que el director de comunicación social de la Secretaría de Gobernación, Alfredo García Medina. ¿Cómo iba a llamarle para hacerle una broma de ese tamaño? Como todo reportero, se incorporo, se froto los ojos y pidió más detalles, pero la respuesta fue tajante: eso es todo lo que puedo decir. Es una nota exclusiva.

Y no se trata de entregar detalles sobre el agitado despertar del periodista, ni tampoco destacar la generosidad mostrada por aquel funcionario de Gobernación hacia su amigo mexicalense. La intención es destacar que la persona que estuvo enterada del operativo en la mansión de Hank, es considerado "amiguísimo" del secretario de Gobernación Francisco Blake Mora.

Apenas tomo posesión Blake como titular de la Secretaria de Gobernación, el señor García Medina se incorporo a la dependencia a invitación de su paisano y amigo. A García Medina no le importó renunciar a su labor como responsable de la atención a medios de comunicación de las entidades federativas de la Presidencia de la República.

Respecto a la filtración de caos Hank, habrá que subrayar que García Medina ha demostrado su absoluta incapacidad para "operar" en los medios de comunicación de Baja California la labor que desempeña su patrón y amigo Francisco Blake Mora. Todos en la entidad del noroeste de México sabemos que Blake aspira a la gubernatura del Estado, aunque no por boca de su "amiguísimo". García Medina quedo en ridículo al filtrar una detención que resultó en un fiasco para el gobierno federal.

El propio Presidente Felipe Calderón declaró la semana pasada que "no fue enterado" del operativo en la casa de Hank y más tarde afirmo que "no se siguió el debido procedimiento". Calderón dice que "alguien" tomo la decisión de realizar el operativo en la residencia de Hank, aunque además subraya que no se hizo bien.

Durante el dialogo que sostuvo con algunos ciudadanos que son víctimas de su guerra contra el narcotráfico, Felipe Calderón dijo que en el caso Hank "aplicó algunos correctivos", aunque no dijo cuáles. Aquí en Baja California se extiende el rumor del cese del general Alfonso Duarte Mujica, comandante de la segunda región militar, a quien culparían de haber ordenado el allanamiento a la casa de Hank. Aunque Cicuta precisa que la orden del operativo debió salir de la Secretaría de Gobernación, lo más fácil para el gobierno seria destituir al general Duarte Mujica, quien por cierto –como buen militar--se ha mantenido en silencio. Si corren a Duarte Mujica, la sociedad comprobara que la autoridad trata a los mexicanos como un ejército de retrasados mentales.

La sociedad sabe que "al cortarle la cabeza" al general Duarte, la autoridad intenta exculparse del rosario de pifias acreditables –primero—al presidente Felipe Calderón quien reconoce que no le informaron sobre este operativo. ¿Qué clase de presidente tenemos que no está informado de asuntos que no solo perjudican a su gobierno y a su partido, sino especialmente a la sociedad?

Con la eventual destitución del general Duarte, el mayormente beneficiado es el secretario de Gobernación Francisco Blake Mora, pues todo indica que este bajacaliforniano fue el artífice del burdo operativo que resultó en el máximo ridículo del sexenio.

Las beneficiarias colaterales son la procuradora general de la República Marisela Morales y su empleada Patricia Bugarin, quien despacha como titular en la Subprocuraduría contra la Delincuencia Organizada (SIEDO). Ambas funcionarias compartieron el ridículo del gobierno federal ante los ojos de los mexicanos. Por cierto que la señora Bugarin le dijo hace un par de semanas al periodista Joaquín López Doriga, que  la decisión de la juez noveno de distrito Blanca Evelia Parra Meza al liberar a Jorge Hank del delito de acopio de armas, le había complicado su labor. Dijo que no sabía qué hacer con las armas incautadas en la casa de Hank, aunque esa interrogante fue respondida por Cicuta: ¡que las regrese al cuartel de donde nunca debieron salir!

Antifaz

Hace justo una semana, el empresario Jorge Hank Rhon ofreció una conferencia de presa para responder las dudas y los cuestionamientos de casi un centenar de periodistas que esperaban conocer detalles de su detención, eventuales resentimientos e intenciones políticas. Para muchas personas, Hank habría cometido un error al "exhibirse orondo" frente a los medios. Lo más cuestionable fue minimizar la labor de la autoridad estatal que –por cierto—también se ganó la burla social. Hank dijo que "iría a declarar en cuanto lo llamaran". La PGJE puede tomarle la palabra; no tendría que ir a su casa.

Los reporteros y los televidentes que observaron detalles de la conferencia de prensa observaron a una persona que portaba una botarga de Xoloitzcuintle, a quien Hank saludo muy afectuosamente al inicio del evento. Luego, algún periodista le preguntó sobre su jefe de escoltas Jorge Vera Ayala a quien se le dio por "desparecido". No hay tal, respondió Hank, el está aquí conmigo.  Era cierto; escondido en el disfraz de Xoloitzcuintle, estuvo –todo el tiempo—su jefe de escoltas Jorge Vera Ayala.

Apegos

En la próxima entrega Cicuta revelara detalles sobre el cariño que se tienen el director de Inspección y Verificación del Ayuntamiento de Tijuana Daniel León Valdez y el titular de la Federación de Organizaciones Sindicales de México (FOSIM) Joaquín Parada Ruiz.  Se quieren tanto que ya son socios.

Comentarios: cicuta45@gmail.com