Jaime flores Martínez
Mesnada
Resignados a recibir "alguna migaja" en la próxima administración federal, muchos priístas bajacalifornianos aceptaron gustosos convertirse en flamantes "coordinadores de lo que sea". Los ciudadanos ya se dieron cuenta que solamente faltaría crear una coordinación de visitas al sanitario.
Y es que la estructura de Peña Nieto, el candidato presidencial tricolor, diseñó una estrategia donde destacan los generales pero la tropa está ausente.
Aquí en Baja California, como en el resto del país, las coordinaciones crecen como la hierba. Del coordinador general de la campaña Enrique peña Nieto, se desprenden muchas dos vice coordinaciones. Hay quien dice que los nombramientos son incontables. Irónico resulta saber que tanta coordinación existe entre ellos que el coordinador general de la campaña en el Estado David Saúl Guakil no atina a charlar con otros tantos coordinadores nombrados desde el centro del país.
Si alguien está interesado en conocer la estructura, el candidato presidencial Peña Nieto tiene a su coordinador general; dos vice coordinadores generales; cinco coordinadores regionales (uno por cada circunscripción); a los coordinadores en vinculación con la sociedad (que incluye empresarios), así como a los coordinadores estatales y municipales. A esto debe sumársele toda la estructura integrada y coordinada por los comités directivos estatales y locales, sin olvidar a las organizaciones civiles, grupos obreros y todo lo que se acumule.
En otras palabras, la estructura que pretende llevar a Enrique peña Nieto el poder es -en los hechos- un ejército de generales carentes de tropa, aunque esperanzados en obtener algún huesito en la próxima administración federal: eso si Peña Nieto es presidente.
Miedito
Los panistas bajacalifornianos andan muy preocupados por el resultado de la elección programada para el próximo 1 julio. Las corrientes panistas "anti-ruffistas" advierten que el eventual triunfo de la dupla Ernesto Ruffo-Víctor Hermosillo podría traerles fatales consecuencias. Estos panistas perderían el control blanquiazul en el Estado porque los controles los tomaría Ernesto Ruffo.
Acostumbrados a mover las piezas como les viene en gana, están seguros que el ex gobernador tendrá absoluto control sobre la elección estatal programada para el próximo año. Es decir, el triunfo de Ruffo sería su derrota, pues sus influenciad quedarían aplastadas y esto no les conviene.
Cicuta no se refiere a los ex alcaldes de Tijuana Jesús González Reyes y Jorge Ramos Hernández, un par de personajes que presumen tener el control político panista en Baja California. Tampoco se trata de los panistas conservadores de Tijuana que tienen voz pero sus berrinches son ignorados.
El grupo panista aludido observa en el ascenso de Ernesto Ruffo al Senado gravísimos riesgos en el control político. Sus nombres son evidentes con solo decir que actualmente ostentan el poder político-gubernamental en Baja California. El mantener la gubernatura del Estado, el conservar el poder caciquil se ha convertido en un obsesión
Lógico
A pesar de los trastornos creados por el Ayuntamiento de Tijuana en el fraccionamiento Playas de Tijuana, la mayoría de los habitantes de esa zona están muy contentos con la repavimentación de la Avenida Ensenada, una de las principales arterias viales.
Desde hace un mes el secretario de Desarrollo Urbano del gobierno de Tijuana David Navarro, ordenó el inicio de los trabajos en esa avenida. Nadie negaría que al retirar el la cinta asfáltica para reponerla, fastidió las actividades habituales de muchos comerciantes y el tránsito de los colonos. Aun con los desvíos permanentes y el cierre de calles aledañas, la mayoría de los residentes de la zona aplauden los trabajos ordenados por David Navarro. ¡Ya era hora!
Muchos de ellos estiman que el gobierno municipal se había tardado en reparar esas vialidades abandonadas de la mano de Dios y --claro-- que las autoridades. Algunos residentes acostumbrados a ponerle filo sus palabras, estiman que el arquitecto Navarro pidió la renovación del pavimento luego de quebrarle la suspensión a su vehículo.
Peatones
Tan puntilloso comentario subraya que David Navarro Herrera es residente del fraccionamiento Playas de Tijuana y seguramente estaba harto de tantísimo bache en las principales arterias y calles secundarias. Por eso debió ordenar la repavimentación en una amplia zona. Muchos habitantes de la zona Este de Tijuana quisieran que Navarro vivera en el Pípila.
Por cierto, el arquitecto Navarro debe ordenar a las constructoras que realizaron esos trabajos que resanen los excedentes de asfalto que dejaron en los extremos de la Avenida Ensenada. Esos bordos son peligrosos no solo para los automovilistas. Varios peatones ya pagaron el precio de ese olvido. Navarro no transita a pie.
Comentarios; cicuta.info cicuta45@gmail.com
Jaime Flores Martinez
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